Un ser despierto (como se le denomina en otras culturas), es alguien en quien los pensamientos y la conciencia se han separado, de modo que los pensamientos ya no dirigen su vida, sino que se ponen al servicio de la conciencia. En un ser despierto, sea hombre o mujer, la identificación con el mundo de las ideas ha finalizado y, por tanto, también se ha disuelto en él o en ella la identificación con la personalidad, con la idea de sí mismo.
La mente es forma, y en estos seres ha terminado la identificación con el mundo de la forma. Los pensamientos o emociones son formas temporales, como también lo son las opiniones, los principios o los modos de ser. Un ser despierto honra la forma, la vive, la goza; pero sin identificarse con ella.
La conciencia de sí, es un espacio para facilitar el estar e intimar con uno mismo. Un lugar para compartir conocimientos teóricos y/o prácticos aprendidos en mi experiencia personal, académico-formativa y profesional como psicóloga, psicoterapeuta gestalt y corporal; Conocimientos y/o reflexiones que te puedan ayudar a entrar en contacto contigo mismo, a conocerte de forma más auténtica, con tu luz y tu sombra; a tomar conciencia de tu cuerpo, de tus emociones y/o pensamientos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario